¡Oh, ser bailarina! Es un reto para cualquier niña, pero más aún si eres un vampiro como Vampirina. En primer lugar, debes encontrar una clase que se reúna por la noche. ¿Entonces tienes que descubrir cómo perfeccionar tu forma cuando no puedes verte en el espejo? Y luego está el uso de rosa (no es el color más favorecedor si eres un no-muerto) y esa persistente necesidad de darles un pequeño mordisco a los otros bailarines. Y lo peor de todo... ¡¡¡MIEDO ESCÉNICO!!! Edición de tapa dura. Escrito por Anne Marie Pace e ilustrado por Le Uyen Pham.